El VAR (Video Assistant Referee) llegó para revolucionar el fútbol.
Desde su implementación oficial en 2018, el vídeoarbitraje transformó los momentos decisivos de los partidos, especialmente en los minutos finales, donde una revisión puede cambiar la historia de un torneo o definir un campeón.
Pero, ¿realmente hizo el fútbol más justo… o simplemente más polémico?
¿Qué es el VAR y cómo funciona?
El VAR, o árbitro asistente de video, permite revisar jugadas clave a través de cámaras y repeticiones en tiempo real.
Solo se utiliza en situaciones específicas:
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Goles y posibles fueras de juego
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Tarjetas rojas directas
El árbitro principal recibe una alerta desde la sala del VAR y puede decidir revisar la jugada personalmente en el monitor del campo antes de tomar una decisión final.
El impacto del VAR en los minutos finales
Antes del VAR, los partidos solían definirse en segundos de emoción pura, sin vuelta atrás.
Hoy, un gol en el minuto 90 no siempre significa celebración inmediata: todos esperan la confirmación de la tecnología.
Esto ha cambiado:
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La forma en que se celebra un gol
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Las tácticas de los entrenadores, que ajustan estrategias sabiendo que cada jugada será revisada
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La psicología de los jugadores, que ahora deben controlar sus reacciones ante una posible revisión
En los últimos años, torneos como la Champions League, la Copa América y el Mundial han tenido finales alterados por decisiones del VAR, generando tanto justicia… como polémica.
¿El VAR ha mejorado el fútbol?
Los defensores del VAR aseguran que el sistema ha hecho el juego más justo y transparente, reduciendo los errores arbitrales graves.
Sin embargo, sus críticos sostienen que rompe la emoción del juego y que, incluso con tecnología, las decisiones siguen siendo interpretativas.
En otras palabras: el VAR no eliminó la polémica, solo la trasladó a una pantalla.
El VAR cambió para siempre el fútbol.
Ahora cada partido tiene una doble mirada: la del árbitro en la cancha y la del videoarbitraje que todo lo ve.
Lo cierto es que, con o sin polémica, el VAR llegó para quedarse… y seguirá siendo protagonista de los momentos más tensos del fútbol moderno.
